sábado, 21 de febrero de 2009

La iglesia en diálogo -- 4

Uno de los delegados a “La iglesia en diálogo” que más distancia recorrió fue Francisco Javier González, quien tiene más de treinta años de ser miembro de iglesia en Chihuahua, en la Misión del Norte, perteneciente a la Unión del Norte. Tras un vuelo de más de 2,700 km, Francisco viene a manifestar las inquietudes de los miembros de su iglesia, quienes al enterarse de su participación en este foro, “estuvieron aportando algunas ideas que podrían ventilarse aquí”.

“Es un gran honor y responsabilidad representar una región tan grande como el Estado de Chihuahua, Durango y la comarca lagunera de Coahuila”, dijo Francisco, quien ha estado involucrado en el liderazgo de su iglesia local y ha sido miembro de la Junta Directiva de la Misión del Norte.

“Me interesa conocer la postura de nuestros líderes acerca del área administrativa. Estoy interesado en saber cuál es la reacción de la iglesia en Interamérica ante la crisis económica mundial y qué ajustes está haciendo para que la iglesia salga adelante”, dijo Francisco. Desde su perspectiva personal, “para la iglesia y los cristianos, la fe es lo que predomina. Sin embargo, sí hay preocupación debido a que el manejo que la administración hace de los recursos. Por ejemplo, en las reuniones que se hacen, en la ubicación de la sede de las oficinas. Son cosas que nos inquietan y que necesitan una aclaración”. Y agregó, “lo primordial es la predicación del evangelio. Y nos preguntamos si no habrá recursos que se podrían utilizar de una mejor manera, no sólo el recurso material sino el recurso humano”.

Tras la experiencia de haber participado, Francisco comentó, “me parece que la respuesta que recibí estuvo bien documentada, hay mucha sensibilidad de parte de la cabeza de la División Interamericana. Lo difícil era hacer una pregunta porque había muchas preguntas que hacer, pero damos gracias a Dios porque Él está moviendo a la iglesia. Esperamos en Dios que en estos tiempos la iglesia experimente un verdadero reavivamiento. Queremos ver a la iglesia en la punta del evangelismo. En general, ha sido un tratamiento oportuno el que he recibido; así que me siento satisfecho”.

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