“Enfrentar los gigantes es semejante a la experiencia de los hijos de Israel al cruzar el Mar Rojo”, dijo el pastor Baraka Muganda, ex director mundial de Jóvenes, en su mensaje predicado la noche del viernes 22 de abril de 2011 en el culto de consagración durante el III Camporee de Conquistadores de la División Interamericana.
Basado en Éxodo 13:13-15, el pastor Muganda elaboró una reflexión sobre la necesidad de permitirle a Dios hacer su obra cuando estamos frente a los grandes obstáculos de la vida. Israel, que por muchos años vivió en esclavitud, no supo lo que era la libertad hasta que el Señor instruyó a Moisés para sacarlos de Egipto. Pero ni bien salieron de Egipto se vieron frente al Mar Rojo.
“Muchos se quejan cuando están frente al Mar Rojo”, dice Muganda, “y le reclaman a Dios; se sienten vulnerables y culpan a Dios de sus problemas. Lo único que están comprobando es que en los momentos difíciles nada que no sea Dios les puede sacar de sus apuros. Tu única confianza es Dios porque Dios nunca falla”, agregó Muganda.
Contra la ansiedad que se vive de cara a los gigantes de la vida, el consejo divino es estar quietos: “manteneos tranquilos” (Éxodo 13:13). “Ustedes, conquistadores, vencedores de gigantes, no pueden vencer porque no están tranquilos”, afirmó Muganda. Y agregó, “La música que escuchan no los deja estar tranquilos, las amistades que los rodean no los dejan estar tranquilos. Ustedes necesitan estar tranquilos”.
Cuando el creyente está tranquilo, entonces el Señor está en condiciones de actuar. “Sólo podremos esperar el milagro cuando estamos quietos. Una vez en paz, confiados, el poder de Dios logra lo imposible”, concluyó Muganda.
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