Unión del Sur solidaria con Haití

Haití es una nación que sigue sufriendo. Tras el devastador terremoto del 12 de enero de 2010 y los brotes de enfermedades infecciosas que le han seguido, el país se levanta a paso muy lento. Se calcula que se han perdido alrededor de 300,000 personas en estos hechos desastrosos.

Muchas organizaciones públicas y privadas, entre ellas la Iglesia Adventista del Séptimo Día han prestado ayuda a los haitianos. Por ejemplo, los Servicios Internacionales Adventistas de Salud (AHIS, por sus siglas en inglés), la Universidad de Loma Linda, la Universidad de Montemorelos, la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA), la División Interamericana, entre otras instituciones adventistas, han extendido la mano generosamente.

En su momento, las uniones de todo Interamérica enviaron recursos financieros, productos en especie y personal para ayudar a la reconstrucción de esta nación. Equipos de diversas partes ayudaron en materia de asistencia médica y construcción con el ánimo de hacer más digna la vida de los habitantes de aquella isla.

Sin embargo, a pesar de tanta ayuda que ha fluído, no todo está resuelto. Volver a edificar las escuelas y los templos es algo que requerirá una inversión muy costosa.

Al inicio de las reuniones de medio año de la División Interamericana (DIA) a principios de mayo de este año, el presidente de la misma, Pastor Israel Leito, mencionó que el presidente de la Unión de Haití, Pastor Theart Saint Pierre, aún vive en una carpa y su casa sigue derrumbada. El Pastor Saint Pierre ha puesto como prioridad la reedificación de los templos y sitios de culto.

Días más tarde, el 19 de mayo de 2011, durante una de las sesiones de negocios de la junta directiva de la DIA en Miami, los administradores de la Unión del Sur de México, los pastores David Javier, Villaney Vázquez y Pedro León, entregaron al Pastor Saint Pierre la cantidad de $10,000.00 dólares de parte de los creyentes del sur de México para que rehabilite su casa.

Al entregar el dinero, los miembros presentes de la junta aplaudieron jubilosos. Y, conmovido, el Pastor Saint Pierre (en la imagen aparece con el micrófono) agradeció públicamente a los líderes de esta unión.